HISTORIA
La iglesia se levanta a finales del siglo XV en Milán, distrito de Porta Venezia. Después de la gran epidemia de peste de 1576, se construye el actual edificio religioso en el sitio del anterior.
El edificio desempeño a lo largo de la historia diferentes funciones. Fue lugar de culto hasta que en 1789, después de la conquista francesa del ducado de Milán, se destino a fines militares, llamándose “Templo de la Patria”
Con el peso de los años se tuvo que reconstruir la cúpula. Reabriéndose como Iglesia en 1884 con la dedicación presente a San Carlos. Actualmente y tras nuevas reformas estructurales se usa como lugar de culto y como sala de conciertos.
La iglesia presentaba un grave deterioro en las pilastras y pilares de toda la construcción, debido a una falta de impermeabilización entre el terreno y las construcción. Con el paso de los años el deterioro se estaba agravando, la altura de la humedad seguia elevandose y continuamente se desconchaban partes del acabado. La sensación térmica y el confort era insalubres, debido a la continua sensación de frío y humedad.
Al tratarse de un edificio monumental, no podía actuarse de cualquier manera. Se requería la actuación de profesionales del sector, que solucionen el problema para siempre de una manera eficaz y sin causar ningún tipo de impacto en los muros de fábrica.
Tras descartar varios sistemas y productos en el mercado, se tomó la opción que mejores resultados está dando en Italia en la última década: La tecnología Biodry
Tras descartar varios sistemas y productos en el mercado, se tomó la opción que mejores resultados está dando en Italia en la última década: La tecnología Biodry
SOLUCIÓN
Se instaló un dispositivo Biodry
para la eliminación definitiva de la humedad por ascenso capilar. De este modo,
se logra que desaparezcan las manchas y sales de las paredes a lo largo de los
6 meses siguientes a la instalación y además, se evita la reaparición de las
mismas, dado que el flujo de agua se ha reconducido hacia el terreno. Por consiguiente la iglesia será un lugar acogedor, sin olores de humedad
ni frío en el ambiente.
RESULTADOS INMEJORABLES
A día de hoy, la iglesia se
encuentra en perfectas condiciones de conservación y se ha convertido en un punto de interés
para la ciudad de Milán. Se usa periódicamente como lugar de culto y como sala de conciertos.
